sábado, 19 de junio de 2010

Los libros susurran


Todos tus muertos vacilan en la inconsciencia de un universo intangible, memorioso y desdichable.

¿Te merezco? Sabiduría robada de yertos cuerpos putrefactos, te anhelo, te busco, te necesito y en tu ausencia me convierto en un monstruo… un demonio come palabras que devora ideas y defeca blasfemias… que soy si no genero más que pautas

“ya no hay nada nuevo bajo el sol”

Solo sombras apáticas, ondulantes y vacilantes parodias de conocimiento nuevo, miel para moscas ciegas, absurdos gusanos ególatras, críticos alimentando sus barrigas con el cadáver exquisito de mentes extintas

¿Produzco o reproduzco? Somos ecos de las voces del pasado, somos en esencia la suma de todas las acciones realizadas desde el principio de los tiempos y cada minúscula porción de pensamiento afecta la piedra más alejada del cosmos, por que las ideas no mueren como la carne, somos pues todos tus muertos, óyenos, léenos y te sabrás más vivo que nunca

“los muertos no hablan, susurran”

Y entre el viento se regocijan y pasean, acariciando nuestras mejillas con el taciturno beso de la duda, la literatura es un arte necromatico, pues el mismo autor revive con cada palabra transpirada del texto

“Puedo intuir, puedo oler, puedo pensar, pero saber jamás”

Seguiremos soñado por ustedes, cierren los parpados y caminen en el onírico paisaje de nuestras mentes.

Larga vida a la imaginación

Descansen en paz, Saramago y Monsiváis

3 comentarios:

  1. Intuir, pensar, quizá pueda también imaginar para crear. Cómo lo hacían estos dos creadores de arte en parrafos.
    Saludos desaparecido este.

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  2. Hola nalgón, pues así sea; y luzca para ellos la luz perpetua xP.

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  3. Cómo me encanta tu habla: "con el taciturno beso de la duda" ¡ah jajaja!.
    Ese gato es el que se llama Catzinger ¿No?.
    Aquí un tvnotas de algunos gatos de Monsivais
    Peligro, Caso Omiso, Copelas o Maullas y Catástrofe.

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