lunes, 20 de septiembre de 2010

Deja vu

Manzanita con Whisky. Dijo la voz de una chica cuando la mesera le ofreció algo de tomar, más que una palabra fue un susurro, uno suave de serena composición y destacablemente joven. Fue en ese instante que surgió en mí el deseo de ponerle rostro al sonido, tal vez solo por curiosidad o por la absurda necesidad de saber quien tenía tan mal gusto para sus bebidas. Volteé a la mesa donde ella se tenía que encontrar justo como a 20 o 30 pasos de mí, lo que halle no fue una mujer, lo que halle fue la sensación de haber tenido una vida feliz.

Deja vu, según tengo entendido es una expresión francesa que significa “ya visto” y normalmente se usa para conceptualizar un fenómeno mental, “el sentimiento de ya haber vivido algo”. Hace tiempo tuve una charla en la cual hablamos sobre el “Deja vu” y el mal uso que yo le daba al concepto.

Aquí un ejemplo de uno de mis Deja vus

Uriel duerme plácidamente sobre el sillón, en su regazo esta el control remoto que se tambalea con cada ronquido, su cara babeante sobre su hombro, es iluminada por la estática de la televisión cuya programación hace tiempo que se agoto. Pero Uriel sueña y dentro de su cabeza se construye una visión, una con un jardín enorme, cuyas lámparas a media tonalidad le dan la bienvenida prematura a la noche, él se encuentra sentado sobre el respaldo de un banquilla de metal, el cigarro de su boca está a punto de terminarse y la música de fondo lo incita a buscar otro en su chaqueta, saca la cajetilla torpemente y dos cigarros caen a la yerba húmeda que hay bajo sus pies, él se incorpora y baja de su banquita para tomarlos, se agacha y escruta tranquilamente el pasto en busca de algún otro cigarro que se le haya podido caer, cuando descubre que en su mano tiene los únicos que cayeron de su cajetilla se levanta y cuando su cuello esta enderezándose se topa con la mirada de una chica.-¿Me das uno?- dice la mujer y el sueño termina… tiempo después en algún evento dentro del museo, Uriel se aburre de intentar charlar con la gente y sale a tomar “aire”. Se sienta melindrosamente sobre una banquita y se pone a fumar mientras divaga, la ansiedad de la noche bajando por los faroles y la música que hace poco empezó a sonar lo pone de buenas para fumarse otro. Saca su cajetilla de Camels pero se le caen dos, con desidia se levanta de la banquita y se agacha a recogerlos, cuando se está incorporando descubre un par de ojos mirándolo desde arriba, se trata de Andrea, una vieja amiga de la prepa – ¿Me das uno?- dice la chica mientras con los ojos le sugiere uno de los cigarros que Uriel tiene en su mano, Este responde desconcertado… -¿Deja vu?-.

Yo creía que este tipo de sucesos pertenecía al deja vu pero según las aclaraciones del otro día esto no es un deja vu si no más bien un augurio o premonición, que es en ciertos casos otro fenómeno pre cognitivo más no el mismo, así que con esto fresco me decidí a estudiar al deja vu y encontré que hay varios tipos.
Deja vecu (ya vivido)
Deja sentí (ya sentido)
Deja visité (ya visitado)
Lo que yo narre se acerca a una especie de “Deja vecu”, pero con la singularidad que posteriormente ya lo había vivido en un sueño… con un deja vu no debes tener ningún tipo de conciencia de donde lo has hecho.
El Deja sentí carece completamente de una base pre cognitiva y vive solo como una explosión de emoción que se manifiesta por un suceso levemente percibido. En cambio el deja visité se enfoca en el conocimiento inusitado de geografía supuestamente nueva, como entrar a una habitación por vez primera y saber donde están la mayoría de las cosas.

Hace tiempo también que tuve otra charla sobre este tipo de fenómenos neurales, y si bien aquella platica no trato de delimitar el uso de los conceptos, si fue una leve explicación motivacional sobre las distintas paramnesias que teníamos y como estábamos jodidos de la cabeza…

Creo que no estábamos tan jodidos...



Tiempo en espiral, por Urielo Sánchez

Te veo bajo el azar del tiempo y el sin saber de tu mirada
Te siento bajo
Las arenas y recuerdos
Y la melancolía cuando llevaba tu nombre
Deja vu
Yo te llamo Fantasma,
Te evoco Milagro
Te susurro ayer
Y sobrevives en el sueño del loco
En el andar del cojo y el saludo del manco
Tu sabes a duda, consternación

¿Una mala decisión?
¿Un grito ahogado? de y un sueño destrozado

Silencio y risa
Odio y fracaso
Te maldigo
Efímera noche de aquel día que murió en la tarde
Sortilegio
Maléfico
Eres deja vu
Estimulo de lo prohibido
Joya y muerte, dulce podrido
Veneno, ámbar, fósil y testigo
Chispa, deseo, anhelo y extrañeza
Eres la mirada occisa
La fotografía marchita
La pantalla latente
La luz encendida
La pareja en el parque
Tú eres Deja vu
Memoria y olvido
Deseo y tempestad
Tiempo retorcido que me lleva al miedo
De evocarte cuando beso otros labios.

1 comentario:

  1. Mm, me fue entretenido leer tu post, aunque de repente sentía que ya me sabía unas partes, aún así esta ligero y de una comprensión también muy fácil...

    ResponderEliminar